En el Colegio Salesiano Don Bosco se valoriza y se vive la dignidad (hijos de Dios) y la de los otros: imagen y semejanza de Dios, restaurada en Cristo y animada por el Espíritu Santo. Se propugna una nueva sociedad construida con los valores de la Doctrina Social de la Iglesia: evangelización, liberación y desarrollo.
Se busca que el joven crezca en coherencia con los valores del Evangelio, con una clara identidad y pertenencia eclesial.
Nuestros profesores, en consecuencia, asumen una visión cristiana de la ciencia y la cultura, que ilumina y orienta todo su quehacer académico, educativo y pastoral.
En perfecta sintonía con la Doctrina de la Iglesia, el Colegio Salesiano Don Bosco reconoce a los padres, el derecho primario e irrenunciable de educar a sus hijos y, por tanto, de poder escoger con plena libertad de conciencia, la escuela que mejor responda al tipo de educación que ellos desean.
Son los padres que se convierten, indudablemente, en los primeros educadores y modelo para la formación integral de sus hijos y, además, son educadores – evangelizadores con el testimonio de sus vidas.
Ellos también se identifican con la axiología cristiana y salesiana y son corresponsables con las propuestas formativas, culturales y evangelizadoras de la Comunidad Educativo-Pastoral (CEP).
El Colegio Salesiano Don Bosco debe contar con el apoyo incondicional de los Padres de Familia. Su sola presencia en el Colegio es el reconocimiento de que los padres son los primeros educadores de sus hijos, y también los más fieles en la tarea educativa.
Dentro de una legítima autonomía, los padres de familia, participan responsablemente de la vida colegial, aportando iniciativas y apoyando la acción educativa, sin interferir el normal funcionamiento del centro, y respetando siempre la axiología del mismo.
El educador laico del Colegio Salesiano Don Bosco, está profundamente convencido de participar en la misión santificadora y educadora de la Iglesia. Por esta razón no puede considerarse al margen del conjunto eclesial.
Con una acendrada vocación de educador y profesional tiene una preocupación por su formación y capacitación permanente y se convierte en innovador, identificado con la Iglesia, con el carisma, la metodología y la espiritualidad del sistema preventivo salesiano.
En los educadores laicos hay un esfuerzo y preocupación por establecer una relación de amicalidad con los alumnos, tratando de ser educadores-pastores, dando testimonio de su fe y generando cultura de paz, justicia y vida. Se aprecia en ellos sensibilidad a los problemas y realidades cambiantes de los jóvenes.
La búsqueda y comunicación de la verdad, compromiso de su vida profesional, se convierten en rasgo fundamental de su peculiar participación en el oficio profético de Cristo que prolonga con su Magisterio.
Nota característica de nuestro Colegio, es la participación consciente y responsable del Claustro de Profesores en la tarea educativa, en la misión evangelizadora con la sincera identificación con los fines e ideales de la educación cristiana.
La solicitud de plaza en el Colegio Salesiano Don Bosco, centro que hace pública su identidad a través del presente ideario, presupone la libre aceptación de la enseñanza de la religión y de la moral católica, que en él se imparten.
Consideramos un deber informar a los padres, sobre el carácter propio de este Centro, a fin de facilitarles la libre elección. Deben conocer este ideario, antes de que sus hijos ingresen al Colegio, a fin de evitar situaciones incómodas en un asunto tan delicado como es la educación de sus hijos.
Aquellos padres que no aceptan formal y explícitamente este ideario, no debieran matricular a sus hijos en este Colegio, sino buscar otro más en consonancia con sus convicciones pedagógicas, morales y religiosas.
La enseñanza escolarizada de la Religión y Moral Cristiana, y también las actividades formativas de carácter pastoral, están sujetas a las orientaciones generales de la Jerarquía Católica y de la Congregación Salesiana.
En este acápite no se puede dejar de mencionar que en el Colegio Salesiano Don Bosco existe la enseñanza y la vivencia de la fe cristiana, incidiendo en que la formación religiosa en la formación integral busca la coherencia entre fe y vida.
Se busca establecer una mayor integración del grupo, un mayor esfuerzo de los educadores para que los jóvenes conozcan y vivan la fe cristiana. En este campo se nota mayor participación de la comunidad salesiana y los colaboradores laicos, más que en la familia. Se percibe una adecuada formación humana, cristiana y salesiana.